¿Alguna vez necesitaste ayuda económica y tuviste que recurrir a una entidad financiera para solicitar un préstamo personal? Pues los créditos hipotecarios, también conocidos como hipotecas, no son tan diferentes a estos préstamos.
Un crédito hipotecario funciona de la siguiente manera: una institución financiera te hace un préstamo para comprar una casa, departamento o terreno; para hacer una construcción o remodelación, bajo un contrato que estipula el pago a ciertos plazos y con un porcentaje de interés. Mientras corre el préstamo tu inmueble queda en garantía y una vez que cubras el monto acordado obtendrás un documento legal llamado Certificado de Libertad de Gravamen, el cual expondrá que la propiedad es tuya y no tiene ningún adeudo.
El uso más común de los créditos hipotecarios es en el financiamiento para casas pero, a diferencia de lo que la mayoría cree, puedes solicitar y usar un crédito hipotecario para distintas finalidades como:
Es difícil establecer un estimado de cuánto puedes obtener para comprar una casa, porque en cada institución financiera el monto varía dependiendo del tipo de crédito y la referencia económica.
Existe una clasificación extensa sobre el financiamiento para casas a la que puedes acceder, pero en este punto nos referimos a las tasas de interés aplicables que puedes elegir:
¿Has solicitado un préstamo personal? Éstos siempre son concedidos en divisas: pesos, dólares, euros, etcétera. Los créditos hipotecarios se pueden otorgar en diferente referencia económica:
Antes de solicitar un crédito hipotecario, debes informarte, comparar y determinar quién te ofrece el mejor costo–beneficio de acuerdo a tus necesidades. Recuerda que éste representa un gran compromiso puesto que la casa misma es la que garantizará tu responsabilidad de pago. Así que no lo tomes a la ligera, cualquier incumplimiento puede poner en riesgo tu patrimonio.
Ten paciencia, pagar una hipoteca te tomará un tiempo considerable. La mayoría de las instituciones financieras te ofrecen plazos de entre 7 y 30 años y cada uno tiene influencia sobre el porcentaje de interés que te proporcionan. Evidentemente, entre más largo sea el plazo que selecciones, mayor será la tasa de interés que tendrás que pagar.
Al terminar el acuerdo, luego de que hayas cubierto todos los plazos establecidos y no tengas algún adeudo, se expedirá el Certificado de Libertad de Gravamen que se mencionó anteriormente, éste expondrá la situación jurídica actual del inmueble, es decir, que no presenta ningún adeudo y que todo el trámite ha sido completado de manera legal.
En realidad, todo el proceso sobre cómo funcionan los créditos hipotecarios es similar en la mayoría de las instituciones financieras. Lo único que necesitas es conocer y comprender detenidamente cada elemento que interviene en él y tomar una decisión que te favorezca.
Síguenos a través de esta guía para que encuentres el crédito hipotecario que te ayudará a convertirte en el dueño de tu patrimonio.
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